Un sistema montañoso ubicado en la parte occidental de la provincia, limitando con la provincia jiennense. Su condición de frontera o lugar de paso según las épocas ha hecho de los Montes Orientales un ámbito de alto valor patrimonial, donde cada época, desde la Prehistoria hasta nuestros días, ha dejado una impronta significativa, como el poblado de los Castellones en Laborcillas, es el asentamiento no troglodita más antiguo del que ha quedado evidencia arqueológica. Diversidad de elementos patrimonializados por la sociedad a nivel local: castillos y torres de vigilancia; hitos del paisaje ferroviario como el puente del Hacho, una importante estructura metálica como antigua línea férrea ubicada sobre el río Guadahortuna, o la estación de Moreda; sierras o singularidades geológicas como Sierra Arana, Cerro Mencal o Piedras de la Solana en Alamedilla.

Muchas de las sierras y cerros de los montes Orientales son miradores naturales con una amplia cuenca visual que trasciende el propio ámbito, gracias a la alternancia entre sierra y campiñas.

Su punto más alto es el Peñón de la Cruz o conocido también como ‘El Cerro’ que se sitúa a una altura de 2.030 metros sobre el nivel del mar.

Destaca un paisaje dominado por colinas con agricultura tradicional, junto con la montaña y algunas lomas con vegetación natural.